Cómo perderle el miedo a manejar

Tan emocionante como puede ser para alguien obtener una licencia de conducir, la idea de salir a la carretera puede ser bastante aterradora para algunas personas, especialmente para los conductores nuevos.

Superar el miedo a conducir no va a ser fácil, pero tampoco imposible. Aquí hay algunos consejos sobre cómo puede superar el miedo a conducir y convertirte en un buen conductor:

Pasos para superar el miedo a conducir 

Asistir a clases de manejo para personas nerviosas 

Si te da miedo la idea de manejar, asistir a clases de manejo para personas nerviosas es un gran primer paso. Es importante encontrar una escuela de manejo con instructores comprensivos y pacientes que te guíen durante todo tu aprendizaje.

Un buen instructor te guiará mientras conduces. Te enseñará lo que ocurre en el exterior y te ayudará a reconocer las posibles amenazas y riesgos del tráfico. A medida que sepas cómo actuar y te sientas en control de la situación, ganarás más confianza al volante. 

Por otra parte, tener un experto sentado a tu lado también te hará sentir más tranquilo. Ten en cuenta que si eres una persona nerviosa, no te sentirás completamente seguro con un familiar o un amigo, ya que no te brindarán el conocimiento ni las técnicas que necesitas para aumentar tu confianza. Entonces lo mejor será buscar la guía de un profesional. 

Limítate a conducir durante el día al principio

Si eres un nuevo conductor y sientes algo de temor, es una buena idea tratar de no conducir de noche si puedes evitarlo. Si lo piensas bien, tienes más de qué preocuparte por la noche porque las personas, los animales y otros vehículos son mucho más difíciles de ver.

Mientras aprendes y trabajas en tu seguridad, te recomendamos seguir conduciendo durante el día. Una vez que hayas superado tu miedo a conducir de día, podrás aventurarte a manejar en la noche con más confianza. 

No te desanimes

Probablemente hayas escuchado el viejo dicho de que si te caes de un caballo, debes volver a subirte a ese caballo. Hay una muy buena razón para este dicho, y se aplica a casi todo lo que hacemos en la vida, incluso manejar. 

Muchas personas descubren que después de tener un incidente al volante, les aterroriza volver a manejar y simplemente dejan de hacerlo. Sin embargo, después de tener esa experiencia negativa, lo mejor que puedes hacer es aprender de ella y retomar el volante. 

Cuanto más esperes para volver a manejar, más difícil será para ti perder el miedo. Así que aunque te cueste al principio, vuelve a conducir.

Confía en tus propias capacidades 

Se amable contigo mismo y anímate con frases de aliento y afirmaciones. Usa declaraciones breves para fomentar sentimientos positivos y ayudarte a perder el miedo a manejar. 

Ese auto-estímulo contribuirá en gran medida a tu progreso. Mientras conduces, puedes decirte esto para que te sientas a gusto: “Tengo miedo, pero puedo hacerlo. Soy capaz de aprender a manejar bien y disfrutarlo”.

No olvides que nunca podrás deshacerte de ese miedo si no confías en tus propias capacidades y no te animas a tomar el volante. 

Comienza por las calles menos transitadas 

Si eres una persona nerviosa, comenzar a manejar por calles poco transitadas te ayudará a adaptarte poco a poco a la conducción. Conocerás las dimensiones del coche y cómo controlarlo sin estar tan preocupado por los demás vehículos y el paso peatonal. 
Ya que estés acostumbrado a las calles más tranquilas, puedes comenzar a aventurarte en las más transitadas. Después de un tiempo, conducir en las autopistas será de lo más fácil y no tendrás preocupaciones en absoluto.

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